Shakira y Piqué: de la guerra a la paz
Shakira y Piqué han pasado de ser una de las parejas más mediáticas y envidiadas del mundo del espectáculo a protagonizar una de las separaciones más polémicas y conflictivas. Sin embargo, parece que las aguas se han calmado entre la cantante colombiana y el ex futbolista español, y ahora mantienen una relación más cordial y fluida por el bien de sus dos hijos, Milan y Sasha.
¿Qué ha cambiado entre ellos? ¿Qué motivos les han llevado a enterrar el hacha de guerra y a entenderse mejor? ¿Qué papel juega la delicada situación judicial de Shakira, que se enfrenta a un juicio por presunto fraude fiscal? Estas son algunas de las preguntas que intentaremos responder a continuación, analizando los últimos acontecimientos que han marcado la vida de la ex pareja.
Los hijos, el nexo de unión
Uno de los factores que ha propiciado el acercamiento entre Shakira y Piqué ha sido la presencia de sus hijos en la entrega de los premios Grammy Latinos en Sevilla, el pasado 16 de noviembre. Los pequeños acompañaron a su madre, que actuó en la gala y recibió el premio a la Persona del Año, y se sentaron en la primera fila de invitados, junto a otros artistas como Alejandro Sanz o Rosalía. Incluso participaron en la actuación de su madre, cantando unas estrofas grabadas de la canción “Nada”.
Esta exposición pública de los niños no provocó ninguna reacción negativa de Piqué, que en otras ocasiones se había mostrado crítico con la forma en que Shakira mostraba a sus hijos en las redes sociales o en los medios de comunicación. Al contrario, el ex barcelonista dio su consentimiento para que los niños viajaran con su madre a España, aprovechando las vacaciones escolares del colegio de Miami donde estudian. Además, según fuentes cercanas al ex jugador, ahora habla directamente con Shakira para resolver los asuntos relacionados con los niños, sin necesidad de intermediarios legales. “Ahora hablan entre ellos, no era así hasta el momento. Recurrir siempre a los abogados para fijar el día que viajaban con papá o se quedaban en Miami con mamá, era de locos. Se ponen de acuerdo entre sí o con sus familiares y tratan estos detalles con cierta tranquilidad”, aseguran a Informalia.
El juicio, la sombra que planea sobre Shakira
Otro de los motivos que ha influido en la mejora de la relación entre Shakira y Piqué es el juicio que se inicia este lunes 20 de noviembre en Barcelona, en el que la Fiscalía acusa a la artista de seis delitos contra la Hacienda Pública por haber defraudado 23,8 millones de euros entre los años 2012 y 2014, al no tributar en España como residente fiscal. Shakira se enfrenta a una posible condena de 8 años y dos meses de prisión, además de una multa millonaria, si no llega a un acuerdo con la Fiscalía antes de la vista oral.
Shakira niega los cargos y sostiene que durante esos años vivía en Bahamas y que sólo visitaba España de forma esporádica para ver a Piqué, con quien no convivía de forma estable. Sin embargo, la Fiscalía cuenta con varios testigos que podrían demostrar lo contrario, entre ellos el propio Piqué, que ha sido citado a declarar para que confirme o desmienta el tiempo que pasaba Shakira en Barcelona. Su testimonio podría ser clave para el desenlace del caso, y por eso la cantante necesita tener una buena sintonía con el padre de sus hijos.
Según informa Informalia, Shakira no quiere pactar con la Fiscalía porque supondría reconocer su culpa y pagar una sanción considerable, algo que considera una humillación. Sin embargo, tampoco quiere arriesgarse a ir a prisión y a dañar su imagen pública. Por eso, podría optar por una solución similar a la de Arantxa Sánchez Vicario, que consistiría en reconocer los hechos, pero sin asumir responsabilidad penal, alegando que confiaba en sus asesores fiscales y que desconocía la normativa española. Para llegar a una decisión así, Shakira necesita paz doméstica y quitar tensiones a la relación con Piqué. Por fin, hay paz entre Shakira y Piqué y sabemos por qué.
