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Fallece la influencer Yamsim Angela tras ser envenenada el día que cumplía 26 años

Celebración que terminó en tragedia

Una influencer brasileña falleció esta semana después de que, según las primeras informaciones, ella y varios invitados consumieran whisky casero presuntamente adulterado con metanol durante la fiesta por su 26º cumpleaños.

Yasmim Ângela Feitosa de Souza, conocida por sus publicaciones de humor ante los 23.000 seguidores que tenía en Instagram, celebró su aniversario en Petrolina, su ciudad natal en el este de Brasil, según informa el Mirror.

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El origen de la bebida y los primeros síntomas

Al parecer, Yasmim y su pareja habían adquirido la botella en un pequeño municipio llamado São Bento do Una y la compartieron con un amigo durante la celebración, que tuvo lugar el lunes por la noche. La madre de la joven explicó al medio brasileño g1 que entre los tres llegaron a consumir aproximadamente litro y medio del whisky.

Al día siguiente, el novio de la influencer manifestó sentirse mal, mientras que ella se mostró “feliz todo el día, bromeando con todo el mundo”. Sin embargo, esa misma noche comenzó a encontrarse indispuesta y su estado se deterioró rápidamente hasta provocar su muerte, según relató su madre.

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Hospitalización y sospechas de intoxicación

El novio de Yasmim y el amigo que también había bebido el whisky fueron trasladados de urgencia a un hospital con sospecha de intoxicación por metanol, aunque por el momento no se ha difundido información sobre su evolución.

El metanol es un líquido transparente utilizado en la fabricación de productos de limpieza, como disolventes industriales para plásticos y pinturas, además de emplearse para eliminar la humedad presente en combustibles de vehículos y aeronaves.

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Riesgos del metanol en el consumo humano

Los seres humanos son especialmente vulnerables a este compuesto, y la mayoría de los casos de intoxicación provienen de la ingesta de bebidas o artículos adulterados que lo contienen. Entre los síntomas más habituales se encuentran náuseas, dolores abdominales y musculares, alteraciones visuales, mareos, debilidad y trastornos de la conciencia que pueden ir desde el coma hasta convulsiones.