Se convierte en la inesperada ganadora de ‘Bake Off’ y lo celebra con un homenaje a sus padres

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Sorpresa en La 1.

Aunque a algunos les sorprenda, ‘Bake Off: famosos al horno’ es un concurso que ya se ha realizado ya tres veces en la televisión en España: primero en Cuatro, posteriormente en Prime Video y, actualmente, en TVE. El formato siempre sorprende por su frescura, para bien y para mal: es mucho más ligero que programas parecidos, como ‘MasterChef’, pero también es posible que se trata de uno más fácil de olvidar por el público.

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Sea como sea, la actual edición de ‘Bake Off: famosos al horno’ ha tenido bastante éxito y ha recibido el respaldo del público. A pesar de que su casting, a priori, fue un tanto indigesto para muchos. Particularmente por personas que siempre se habían asociado al «universo Mediaset», como podrían ser Rocío Carrasco, Alba Carrillo o Terelu Campos.

Ya hay ganadora de ‘Bake Off’.

En una noche cargada de dulces emociones y recuerdos nostálgicos, el plató de ‘Bake Off: famosos al horno’ se transformó en un escenario de triunfo para Ana Boyer. La emisión del miércoles 3 de abril por La 1 marcó el final de una competencia que cautivó a los espectadores con su mezcla de talento y pasión por la repostería. Ana, hija de la icónica Isabel Presyler y del recordado Miguel Boyer, se alzó con el título de la primera edición del talent show, dejando una huella imborrable con su habilidad para conjugar los sabores y las memorias de su infancia.

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La final del concurso fue un homenaje al cine, un arte que ha inspirado a generaciones y que en esta ocasión sirvió de musa para las creaciones culinarias de los finalistas. Ana Boyer, Rocío Carrasco y Blas Cantó se enfrentaron en una prueba decisiva: elaborar una tarta de dos pisos, cada uno con un sabor distinto y un relleno único, todo ello inspirado en su película favorita. La creación de Ana, inspirada en las tardes de cine con su padre, destacó por su originalidad y exquisitez, ganándose el aplauso unánime del jurado.

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El homenaje a los padres.

“De pequeña, empecé una tradición con mi padre. Casi todos los fines de semana nos poníamos una película de James Bond y comíamos chocolate. Hoy, obviamente, tenía que hacer una tarta de James Bond”, compartió Ana, con una voz teñida de emoción. Su pastel no era solo un postre, sino un tributo a esos momentos compartidos, una obra que evocaba los elementos más icónicos de las películas del agente 007: el glamour de los casinos y la sutileza de un Martini adornado con una aceituna. Los jueces, impresionados, notaron la perfección en cada capa y la armonía de sabores que capturaban la esencia de Bond, el espía que conquistó al mundo con su carisma.

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Aunque los expertos Damián Betular y Paco Roncero sugirieron que el sabor a aceituna podría haber sido más pronunciado y que una paleta de colores más arriesgada habría añadido elegancia al conjunto, Eva Arguiñano no escatimó en elogios: “Los bizcochos son los mejores que he probado en esta edición”.

Superando por poco a sus competidores, Rocío Carrasco y Blas Cantó, Ana Boyer se posicionó en la cima. Antes de ser proclamada ganadora, Paula Vázquez reconoció que incorporar a Ana al programa había parecido “una misión imposible”. Sin embargo, la experiencia resultó ser gratificante y reveladora. “El camino ha sido divino, has tenido una progresión muy grande. En un momento vimos a una Ana un poco complicada, con alguna torta que más o menos no salió. El camino ha sido lindo, te has superado”, expresó Betular.

El anuncio del nombre de la vencedora fue un momento de júbilo, y Ana, generosa en su victoria, dedicó su premio de 100.000 euros a la organización benéfica Mensajeros de la Paz, cerrando la noche con un gesto de solidaridad que resonó tan fuerte como su talento en la repostería.